miércoles, 28 de enero de 2009

EXAMEN DE CONDUCIR ... ¿Aviones? ¡NO!


Fernando: El Conductor triunfante







La buena noticias es que Fernando pasó el examen y ya tiene la licencia de conducir australiana.
La mala noticias es que yo no lo pasé.

La verdad es que la experiencia no es envidiable por nadie.

Son 45 minutos de mucha tensión, en los que tienes a una persona sentado atrás que te dice por dónde debes conducir (“turn right on next street, turn left on next street, turn right on next traffic light, turn left on next round about, ……….”), y además pendiente de si miras el espejo retrovisor antes de poner la luz de cruce, si pones la luz o no, si miras por el retrovisor lateral, si te pasas del límite de velocidad o vas muy lento, si vas tenso o calmado, etc. etc..

En mi caso, habían transcurrido más de 40 minutos y todo iba muy bien, hasta que de repente el evaluador me hizo parar y me preguntó, por qué canal va uno cuando entra en una calle y yo le dije, “por la derecha”. Pues efectivamente, eso fue lo que hice, entré por la derecha en una calle, es decir, POR EL CANAL CONTRARIO………!!!!!!! Por su puesto me hizo parar en el acto y me dijo que había fallado y que me tenía que pasar al asiento del copiloto, que ahora manejaría el instructor.

La sensación es indescriptible, me dieron ganas de llorar, de gritar. No podía creer que después de 40 minutos, casi a 3 cuadras de terminar el examen, había cometido esa locura de meterme por el canal contrario. Y lo peor de todo, es que no me di cuenta, si él no me lo dice, yo sigo como si nada hubiera pasado.

Cuando llegué a donde estaba Fernando, me provocaba llorar, me sentía como si todo lo que habíamos superado para estar acá, no hubiera valido la pena, que este cambio es tan grande (por no decir tan ARRE….), que los retos se hacen insuperables. Total, que me deprimí todo el día, llegué a la casa, preparé almuerzo y me fui a dormir. Luego le dije a Fernando que fuéramos a dar una vuelta. El insistió en que manejara yo, la verdad es que no me provocaba, pero lo hice. Y que les cuento, cuando iba saliendo del centro comercial, me volví a meter por el canal contrario. Fernando me decía “left side, left side, left side” y fue cuando me di cuenta que estaba por la derecha.

Ahí fue que entendí por qué debía raspar el examen. Verdaderamente no estoy preparada para tener la licencia. Tengo que concentrarme mejor en que acá se maneja por la izquierda, por lo que tengo que seguir practicando.

Así que entendí que no es fin del mundo, sólo un reto al cual debo prepararme para superarlo.

Mi próxima cita es el 5 de marzo. Lo que quiere decir que tengo más de 1 mes para practicar.

Esto es un aprendizaje, pues como dice Fernando, “tú crees que eres perfecta, pero no lo eres, todos cometemos errores”.

Una buena enseñanza. Bueno amigos y familiares, será hasta la próxima.



No hay comentarios: